Cada segundo cuenta cuando se administra RCP
Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 03 Aug 2011
Un nuevo estudio declara que el número de sobrevivientes de paro cardiaco aumenta significativamente si la pausa entre detener la resucitación cardiopulmonar (RCP) y usar un desfibrilador para administrar un choque eléctrico es de menos de 10 segundos.Actualizado el 03 Aug 2011
Los investigadores del Hospital St. Michael (Toronto, Canadá) y la Universidad de Toronto (Canadá) examinaron los expedientes de 815 pacientes que sufrieron un paro cardíaco extra-hospitalario entre diciembre de 2005 y junio de 2007. Los datos fueron recogidos por el Consorcio de Resultados de Reanimación (ROC), un grupo de 11 centros regionales clínicos canadienses y de EUA, entre ellos más de 200 agencias que realizan investigaciones relacionadas con la reanimación de un paro cardíaco y la lesión traumática que amenaza la vida. Los pacientes fueron tratados con un desfibrilador externo automático (DEA) o un desfibrilador manual.
Los investigadores hallaron que las probabilidades de sobrevivir hasta el alta hospitalaria fue significativamente menor para los pacientes cuyos equipos de rescate detuvieron la RCP, 20 segundos o más, antes de dar la descarga (la pausa pre-shock), y para los pacientes cuyo rescatistas detuvieron la RCP antes y después de la desfibrilación (la pausa peri-choque) durante 40 segundos o más. Los investigadores también encontraron que los pacientes con pausas peri-shock de más de 40 segundos tuvieron una disminución del 45% en la supervivencia cuando se compararon con los que tuvieron pausas peri-shock de menos de 20 segundos. En total, los investigadores encontraron una caída del 18% en el número de pacientes que sobreviven para ser dados de alta del hospital por cada incremento de cinco segundos en la pausa entre la RCP y proporcionar una descarga con un desfibrilador. El estudio fue publicado en la edición del 20 de junio de 2011, de la revista Circulation.
“Hemos encontrado que si el intervalo entre el fin de la RCP y administrar una descarga fue de más de 20 segundos, la posibilidad de una supervivencia del paciente fue de 53% menos que si ese intervalo fue de menos de 10 segundos”, dijo el autor principal, Sheldon Cheskes, MD, un profesor asistente de medicina de urgencias en la Universidad de Toronto. “Es interesante que no había ninguna asociación significativa entre el momento de dar el choque y la reanudación de la RCP, conocida como la pausa post-shock, y la supervivencia al alta. Esto nos llevó a creer que un motor principal para la supervivencia estaba relacionado con el intervalo de pausa pre-shock”.
Con base en los resultados del estudio, los investigadores recomiendan que los paramédicos deben reducir al mínimo las interrupciones de la RCP y desfibrilar preferentemente a los pacientes en el modo manual para limitar la pausa pre-shock a un “momento óptimo” de cinco segundos. Además, los fabricantes de DEA deben modificar el software de un desfibrilador para acelerar la evaluación del ritmo cardíaco de un paciente y permitir que los dispositivos suministren descargas más oportunas en el modo DEA.
Enlaces relacionados:
St. Michael's Hospital
University of Toronto