Máquina cardiopulmonar nueva mejora la supervivencia de los ataques cardíacos

Un sistema móvil avanzado, para el control personalizado de la circulación extracorpórea, ayuda a preservar la función cerebral durante la reanimación después de un paro cardíaco.

El sistema CARL de Resuscitec (Friburgo, Alemania), fue diseñado para realizar una reperfusión automatizada controlada de todo el cuerpo con el fin de mejorar la supervivencia y la recuperación neurológica en pacientes afectados por un paro cardíaco agudo. El sistema incluye tres elementos principales:


• El CARL.CONTROLLER, un sistema de perfusión con control de bomba dual potente y automatizado para generar un flujo sanguíneo pulsátil alto, un sistema sensor de medición integral con análisis de gases en sangre arterial y venoso en línea y un catéter de fibra óptica enchufable para el monitoreo invasivo de la presión arterial, además de un equipo de perfusión compacto y preconfigurado para una puesta en marcha rápida y sencilla del sistema.
• CARL.MOX. Un suministro de oxígeno móvil para la oxigenación y descarboxilación controladas en el circuito extracorpóreo. El sistema de ahorro de recursos aprovecha el aire de la habitación mediante tecnología de soplado, controlando con precisión la concentración de O2 (21 a 100%) y la eliminación de CO2 (hasta 12 L/min de flujo de gas). El sistema puede funcionar durante aproximadamente cuatro horas con la energía de la batería.
• El CARL.COOLER, un dispositivo de hipotermia móvil para el enfriamiento terapéutico rápido en el contexto de la circulación extracorpórea, que puede proporcionar una capacidad enfriamiento hasta 4°C en pocos minutos. Un kit enfriador desechable proporciona enfriamiento, independiente de los recursos, por reacción endotérmica, con conexión directa al oxigenador.

Las características de rendimiento tecnológico de los componentes del sistema CARL se basan en los requisitos de la Terapia CARL, un enfoque terapéutico novedoso para la reanimación que enfatiza la reperfusión controlada, dirigida y personalizada de todo el cuerpo. El exclusivo sistema de control de doble bomba permite el potente flujo sanguíneo pulsátil necesario para mantener la presión arterial alta, un control preciso de los niveles de oxígeno y un enfriamiento rápido y seguro de la temperatura corporal.

“Los niveles de oxígeno deben ser bajos y aumentar lentamente. De lo contrario, se generan radicales libres en los tejidos. Estas moléculas muy agresivas pueden atacar, entre otras cosas, las mitocondrias, los generadores de energía de las células”, dijo el profesor Friedhelm Beyersdorf, MD, de la Universidad de Friburgo, codesarrollador de CARL. “El método CARL incorpora las últimas investigaciones básicas y técnicas cardíacas de vanguardia. Después de décadas de investigación, pudimos desarrollar un método nuevo de tratamiento para reducir el daño físico que, de otro modo, ocurriría después de un paro cardíaco y la reanimación”.

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