Dudan de la efectividad de terapia con oxígeno hiperbárico
Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 10 Apr 2013
El uso de la Terapia de Oxígeno Hiperbático (HBOT) para el pie diabético no mejoró la probabilidad de que una herida sanara ni previno la amputación, según un nuevo estudio. Actualizado el 10 Apr 2013
Investigadores de la Universidad de Pensilvania (Filadelfia, EUA) realizaron un estudio longitudinal de cohorte observacional para comparar la efectividad de la HBOT con otras terapias convencionales para el tratamiento de una úlcera de pie diabético, y la prevención de la amputación de la extremidad inferior. Los autores estudiaron 6.259 individuos con diabetes, perfusión arterial adecuada del miembro inferior, y úlcera del pie extendiéndose a través de la dermis, representando 767.060 días-persona de cuidado de la herida. Para abordar la desviación de la selección del tratamiento, los autores usaron puntajes de propensidad para determinar la tendencia para la selección de la HBOT.
Los resultados mostraron que en los modelos de puntaje de propensidad ajustados, los individuos que recibieron HBOT tuvieron menos probabilidad de tener curación de su úlcera del pie y más probabilidad de tener una amputación. Se realizaron análisis adicionales, incluyendo el uso de una variable instrumental, para evaluar la solidez de los resultados para factores de confusión; no se encontró que la HBOT mejorara la probabilidad de que una herida pudiera sanar o disminuir la probabilidad de amputación en cualquiera de esos análisis. El estudio fue publicado el 21 de Febrero de 2013, en la revista Diabetes Care.
“La HBOT no pareció ser útil para la prevención de la amputación y no mejoró la probabilidad de que una herida sanara en una cohorte de pacientes definida por los criterios de elegibilidad de los Centros de Medicare y Servicios Medicaid”, concluyeron el autor principal, David Margolis, MD, PhD, y colegas del departamento de dermatología.
La HBOT incluye la respiración de oxígeno puro en una cámara sellada que se ha presurizado a 1,5 a 3,0 veces la presión atmosférica normal. La primera cámara conocida fue construida por un clérigo británico llamado Henshaw en los años 1600s. La investigación ha demostrado que la HBOT puede ayudar cuando se usa como un tratamiento convencional para la prevención y tratamiento de la osteoradionecrosis, así como también para más de una docena de problemas de salud como la enfermedad de descompresión, envenenamiento por monóxido de carbono, gangrena absceso cerebral, y lesiones en las cuales los tejidos no obtienen oxígeno suficiente.
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University of Pennsylvania