Asocian antibióticos a la enfermedad inflamatoria intestinal pediátrica
Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 04 Nov 2012
La penicilina, las tetraciclinas y varios otros antibióticos comunes pueden producir enfermedad inflamatoria intestinal (EII) en niños, según un nuevo estudio.Actualizado el 04 Nov 2012
Investigadores de la Universidad de Washington (Seattle, EUA), el Hospital Infantil de Filadelfia (CHOP, PA, EUA) y el Hospital Infantil de Seattle (WA, EUA), realizaron un estudio de cohorte retrospectivo que incluyó a 1.072.426 individuos de 464 consultas ambulatorias en el Reino Unido que participan en la Red de Mejoramiento de la Salud para determinar si la exposición a los antibióticos antianaeróbicos en la infancia está relacionada con el desarrollo de la EII. Los investigadores revisaron los datos de todos los niños con más de dos años de seguimiento entre la primera visita a la consulta y el desarrollo de la EII, cancelación del registro, 19 años de edad o la muerte; todas las formulaciones de antibióticos fueron tenidas en cuenta.
Los resultados mostraron que la incidencia de EII entre los individuos no expuestos y expuestos, a los antibióticos antianaeróbicos, fue de 0,83 y 1,52 por 10.000 personas-año, respectivamente, para un aumento del riesgo relativo del 84%. La exposición durante la infancia se asoció con el desarrollo de la EII, pero esta relación disminuyó con el aumento de la edad al momento de la exposición. La exposición antes del año de edad tuvo una razón de riesgo ajustada de 5,51, pero se redujo a 2,62 si la exposición sucedía a los 5 años y a 1,57 a los 15 años. Los investigadores encontraron que existía un efecto dosis-respuesta, con la recepción de más ciclos de antibióticos más altamente asociados con el desarrollo de EII; cada curso antibiótico aumentaba el riesgo de EII en un 6%. El estudio fue publicado en la edición de octubre 2012, de la revista Pediatrics.
“Los resultados fueron similares para las dos categorías de EII de enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa”, concluyeron el autor Matthew Kronman, MD, del Hospital de Niños de Seattle, y sus colegas. “Uno podría esperar que este tipo de infecciones fuera principalmente gastrointestinales, sin embargo, sólo el 1,6% de las formulaciones antibióticas a los individuos que desarrollaron EII fueron por infecciones gastrointestinales y excluir a estos individuos del análisis, no cambió los resultados”.
Los investigadores advirtieron que la causalidad reversa era una posibilidad, siendo la causa de la asociación un momento incorrecto para el diagnóstico de la EII, por lo que algunos pacientes podrían haber recibido antibióticos antianaeróbicos para el tratamiento de una EII no diagnosticada.
Enlaces relacionados:
University of Washington
The Children’s Hospital of Philadelphia
Seattle Children's Hospital