Guías de la influenza pandémica H1N1 para mujeres embarazadas

Se les ha recomendado a las mujeres embarazadas que se vacunen tanto contra la gripe estacional, como contra la gripe pandémica H1N1, para estar completamente protegidas. Las dos vacunas se deben administrar tan pronto estén disponibles.

Las vacunas contra la influenza estacional dadas a millones de mujeres embarazadas en los años anteriores no han mostrado efectos dañinos para ellas o sus bebés. La vacuna contra la influenza pandémica H1N1 es fabricada de manera idéntica a todas las vacunas previas contra la influenza.

Si una mujer embarazada tiene síntomas de influenza o si ha tenido contacto con alguien que tiene la gripe, debe consultar inmediatamente con el médico. Cualquier medicina formulada es de más ayuda si se comienza tan pronto la mujer embarazada se enferma. Las mujeres embarazadas que se enferman con la H1N1 pandémica tienen un riesgo alto de problemas serios de salud, como una neumonía severa, parto temprano, e inclusive muerte.

Los síntomas de todos los tipos de influenza incluyen algunos de los siguientes: fiebre, tos, dolor de garganta, nariz tapada o congestionada, dolor del cuerpo, dolor de cabeza, escalofríos, fatiga e inclusive algunas veces, diarrea y vómito. Sin embargo, algunas personas con la gripe no tienen fiebre.

Los prestadores de salud de bebés de menos de seis meses deben ser vacunados contra las gripes, estacional y pandémica. Esto incluye a la madre y cualquier miembro de la familia, u otros miembros que cuiden a estos bebés.

Para prevenir la diseminación de los virus de la influenza, se debe evitar un contacto cercano con las personas enfermas, se deben tomar precauciones apropiadas para los estornudos y la tos, y las manos se deben lavar frecuentemente con agua y jabón.

Es necesario el cuidado médico de urgencias para las mujeres embarazadas que sufren de la influenza H1N, si los siguientes síntomas están presentes--dificultad para respirar, dolor o presión en el pecho o abdomen; mareos súbitos, confusión, vómito severo o persistente, una fiebre alta que no responde a la droga antipirética, acetaminofén (paracetamol); o si hay un movimiento nulo o disminuido del feto. Una vez que el bebé ha nacido, la madre puede lactar, si esto es posible.

La información para las mujeres embarazadas fue suministrada por los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades de los Estados Unidos (CDC; Atlanta, GA; EUA), en Octubre 6, 2009.

U.S. Centers for Disease Control and Prevention

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