Medios de cultivo para FIV afectan respuesta de embriones

Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 22 Sep 2016
La composición de los medios de cultivo utilizados en el laboratorio durante la fecundación in vitro (FIV) afecta a los embriones y a los bebés resultantes, según un estudio reciente.
 

Imagen: Un embrión en un medio de cultivo (Fotografía cortesía de ivf.com).
Unos investigadores del Centro Médico de la Universidad de Maastricht (MUMC; Holanda), del Centro Médico de Nijmegen de la Universidad de Radboud (Nijmegen, Holanda) y de otras instituciones, realizaron un estudio aleatorizado, doble ciego y controlado en diversos centros, con 836 parejas que estaban programadas para una IVF o para un tratamiento mediante la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), en uno de los seis centros participantes de Holanda, entre julio de 2010 y mayo de 2012. Los investigadores compararon el uso del fluido humano de trompas (HTF; 419 parejas) y de G5 (417 parejas) como medios de cultivo de los embriones para la fecundación in vitro. El resultado bajo estudio fue la tasa de nacidos vivos.
 
En total, nacieron vivos 383 bebés, de los cuales 300 eran embarazos únicos y 80 eran gemelos. El peso al nacer fue menor en el grupo con G5 que en el grupo con HTF, con una diferencia de 158 gramos en promedio. Además, nacieron más bebés únicos de forma prematura en el grupo con G5 e, incluso después del ajuste para el sexo y la edad gestacional al nacer, el peso promedio al nacer fue aún menor en el grupo con G5. Por otra parte, un mayor número de embriones cultivados en el medio con G5 fueron lo suficientemente aptos como para ser implantados y las tasas de implantación cuando se utilizaron embriones frescos fueron significativamente más altas, al igual que las tasas de embarazo. El estudio fue publicado el 23 de agosto de 2016, en la revista Human Reproduction.
 
“Hemos demostrado que los embriones humanos que son cultivados in vivo son sensibles a su entorno y que algo está programado en el interior de estos embriones durante esos pocos días anteriores a la transferencia al útero y que todavía tiene un efecto nueve meses más tarde”, dijo el autor principal, John Dumoulin, MD, director del laboratorio de FIV del MUMC. “Esto significa que debemos tener cuidado y que ya no debemos aceptar a ciegas los nuevos medios de cultivo u otras alteraciones de los procedimientos clínicos o de laboratorio, sin antes estudiar de manera rigurosa su efectividad y su seguridad”.
 
“Ya se ha demostrado que el peso al nacer de los niños nacidos de parejas con baja fertilidad y que fueron concebidos de forma natural, es menor que el de los niños de la población general. Debe haber en juego algunos factores relacionados con los pacientes, que hacen que se presente un menor peso al nacer para estas parejas en particular”, concluyó el Dr. Dumoulin. “Tal vez en nuestro estudio, los bebés con G5 son los “normales”, con un peso al nacer que es correcto para su origen particular, de parejas con baja fertilidad, mientras que los bebés con HTF son demasiado pesados. Sólo que es muy poco lo que sabemos hasta el momento”.
 
No existe una regulación uniforme sobre los medios de cultivo para los embriones. En Europa, la mayoría de los medios aprobados para su uso tienen la marca CE, pero otros se pueden seguir utilizando. En los Estados Unidos, esos medios de cultivo deben obtener la aprobación de la Dirección de Alimentos y Medicamentos (FDA). En general, los centros de fertilidad eligen cuáles medios de cultivo desean usar, de acuerdo con sus propias preferencias.

Enlaces relacionados:
 
Maastricht University Medical Center
Radboud University Nijmegen Medical Centre
 


Últimas Cuidados de Pacientes noticias