Nuevo método administra terapias celulares en pacientes críticos con soporte pulmonar externo
Actualizado el 17 Apr 2025
Hasta ahora, ha sido prácticamente imposible administrar terapias celulares a pacientes conectados a oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO), un sistema de soporte vital utilizado en casos críticos de insuficiencia pulmonar. El riesgo de obstruir las membranas de intercambio gaseoso con infusiones intravenosas ha sido un obstáculo importante. Ahora, un nuevo estudio publicado en Stem Cell Research & Therapy presenta un enfoque innovador para administrar terapias celulares de forma segura a pacientes con ECMO.
El nuevo método, desarrollado por un equipo clínico multidisciplinario liderado por la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH, Elche, España), se denomina CIBA (Administración Consecutiva Intrabronquial). Este enfoque permite la administración directa de tratamientos con células madre en los alvéolos de pacientes en estado crítico que no pueden recibir terapia intravenosa tradicional debido a las limitaciones del sistema ECMO. Mediante una administración intrabronquial controlada y fraccionada, el método CIBA deposita las células terapéuticas precisamente donde se necesitan en los pulmones, sin interrumpir el circuito ECMO.
Mediante el uso de CIBA, las células madre mesenquimales (MSC), que pueden obtenerse del cordón umbilical, la médula ósea, el tejido adiposo o la pulpa dental, se administran directamente en los pulmones. Las MSC son células no especializadas con la capacidad de migrar a tejidos dañados, modular la inflamación y promover la regeneración tisular. Una vez administradas en los pulmones, estas células interactúan con células inmunitarias, como los macrófagos alveolares, y liberan señales antiinflamatorias que ayudan a prevenir un mayor daño tisular y favorecen el proceso de cicatrización.
Este método elimina la necesidad de circulación sistémica y concentra el efecto terapéutico directamente en los pulmones, minimizando los posibles riesgos. El equipo de investigación sugiere que se podrían explorar dosis más altas o administraciones repetidas en futuros ensayos. Además, han decidido no patentar la técnica para facilitar su uso en los sistemas de salud pública una vez que se completen los ensayos clínicos adicionales.
"Lo que hemos conseguido es abrir una nueva puerta para tratar los fallos respiratorios más graves", explica el profesor Bernat Soria, del Instituto de Bioingeniería de la UMH, quien dirigió el equipo de investigación. "Cuando un paciente necesita una máquina para respirar por él, las terapias celulares no se podían administrar por las vías habituales, porque las células podían atascar el sistema. Nuestro método permite entregarlas directamente en el pulmón, sin poner en riesgo al paciente. Es como regar con cuidado una planta muy delicada: poco a poco y justo donde lo necesita."