Stent que se expande con el crecimiento del niño podría reducir las cirugías cardíacas en bebés

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EUA, cada año nacen en Estados Unidos aproximadamente 40.000 bebés con un defecto cardíaco. Muchos de estos bebés tienen un estrechamiento en la aorta, que lleva sangre desde el corazón al resto del cuerpo, o en la arteria pulmonar, que transporta sangre desde el corazón a los pulmones. Si bien el primer stent fue aprobado por la FDA en 1994, estaba diseñado para adultos. Hasta ahora, la única solución para los bebés con vasos sanguíneos estrechos ha sido cambiar el tamaño de los stent para adultos para que se ajusten a sus pequeños vasos, lo que requiere múltiples reemplazos a medida que el niño crece. Sin embargo, ahora está disponible un nuevo dispositivo diseñado específicamente para bebés con vasos sanguíneos estrechos.

Los investigadores del hospital Cedars-Sinai (Los Ángeles, California, EUA), en colaboración con Renata Medical (Newport Beach, California, EUA), han desarrollado y probado el Sistema de Stent Minima, un stent diseñado para crecer con el niño. Con un diseño único, el stent puede expandirse a medida que el niño crece, eliminando la necesidad de una cirugía a corazón abierto. En cambio, la expansión se realiza durante un procedimiento de cateterización de dos horas, y los niños generalmente pueden irse a casa al día siguiente del procedimiento. El stent, hecho de una malla metálica, está diseñado para mantener abiertos los vasos sanguíneos en recién nacidos, bebés y niños con estrechamiento de la aorta o la arteria pulmonar. Su capacidad de expandirse a medida que el niño crece tiene como objetivo reducir la necesidad de cirugías adicionales a medida que se necesitan stents más grandes con el tiempo.

La Administración de Alimentos y Medicamentos de los EUA (FDA) aprobó recientemente el Sistema de Stent Minima para su uso en recién nacidos, infantes y niños con estrechamiento en la aorta o la arteria pulmonar. Cedars-Sinai es uno de los pocos hospitales de los Estados Unidos donde los cardiólogos intervencionistas están capacitados para colocar el stent y ofrecer atención especializada a los niños que lo necesitan. Cedars-Sinai también fue uno de los cuatro centros médicos que participaron en un estudio de viabilidad temprana, que ayudó a obtener la aprobación de la FDA para el stent. Los resultados del estudio, publicados en la revista Clinical Science, demostraron que el stent se implantó con éxito y abrió eficazmente los vasos sanguíneos estrechos.

“Los stents que hemos utilizado hasta ahora tenían un diámetro máximo fijo, lo que significa que será necesario reemplazarlos, generalmente mediante cirugía a corazón abierto.”, dijo el Dr. Evan Zahn, director del Programa de Cardiopatías Congénitas Pediátricas en Guerin Children's y del Departamento de Cardiología en el Smidt Heart Institute, y director médico de Renata Medical, quien ayudó a desarrollar el nuevo stent. “Esta aprobación representa un cambio monumental en la forma en que cuidamos a los bebés con enfermedad cardíaca congénita. Es una alegría saber cuántos pacientes y familias se verán positivamente impactados ahora que el stent está más ampliamente disponible”.

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