Terapia con nanopartículas reduce metástasis hepáticas
Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 12 Apr 2018
Atacar las células endoteliales sinusoidales con nanopartículas cargadas con elementos de microARN reduce la metástasis del cáncer de colon (CC) al hígado en un 80%, según un estudio nuevo.Actualizado el 12 Apr 2018
Investigadores de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU; Vizcaya, España) y de la Universidad de Santiago de Compostela (A Coruña, España) realizaron un estudio en ratones diseñado para examinar si restablecer la función de las células endoteliales sinusoidales alteradas en el hígado podría ayudar a ralentizar el proceso metastásico del CC en el hígado, ya que se sabe que las células endoteliales dañadas promueven la angiogénesis, lo que ayuda a que crezca la masa tumoral metastásica.
Los investigadores indujeron inicialmente metástasis hepáticas en ratones usando células de CC. A partir de la masa tumoral resultante, extrajeron las células endoteliales. Al comparar estas células endoteliales con las sanas, descubrieron que tanto las proteínas como los componentes del micro ARN estaban alterados. Utilizando herramientas de bioinformática, luego cribaron y seleccionaron las proteínas y los elementos relevantes de microARN, terminando con un microARN específico, miR-20a, que aparece en las células endoteliales sanas, pero desaparece en las células en contacto con el tumor.
Para restablecer los niveles normales de miR-20a, los investigadores desarrollaron nanopartículas de éster de sulfato de condroitina-sorbitán, que fueron conjugadas con miR-20a en un sistema de aplicación dirigido específicamente contra las células endoteliales sinusoidales hepáticas. La restauración de los niveles normales de mir-20a indujo la regulación negativa de la expresión de sus dianas proteicas, dando como resultado una reducción de la migración celular in vitro y una reducción de la activación in vivo y la capacidad y habilidad de infiltración del tumor en aproximadamente 80%. El estudio fue publicado el 15 de marzo de 2018 en la revista International Journal of Cancer.
“El análisis patológico reveló que, en los casos tratados, se habían formado muchos menos vasos sanguíneos nuevos dentro de los tumores. Si alguna vez se usa como tratamiento, será un tratamiento complementario”, dijo el autor principal, Iker Badiola, PhD, del departamento de biología celular e histología de la UPV/EHU. “No se puede ignorar el hecho de que la metástasis sigue creciendo un 20% y, lo que, es más, en ningún momento se destruyen las células tumorales ni se atacan directamente. La estrategia de abordar la metástasis que hemos logrado implica limitar el suministro de nutrientes y oxígeno; en otras palabras, restringimos la ayuda”.
La metástasis implica una serie compleja de pasos en los que las células cancerosas abandonan el sitio tumoral original y migran a otras partes del cuerpo a través del torrente sanguíneo, del sistema linfático o por extensión directa. Para lograrlo, las células malignas se separan del tumor primario degradando la matriz extracelular circundante (MEC), que separa el tumor de los tejidos adyacentes, y migran a otros órganos. Como uno de los eventos críticos requeridos para el crecimiento tumoral posterior es el suministro de sangre, se cree, por lo tanto, que los inhibidores de la angiogénesis podrían prevenir o reducir el crecimiento de metástasis.
Enlace relacionado:
Universidad del País Vasco
Universidad de Santiago de Compostela