Elevación de PA post cirugía cardíaca se relaciona con resultados adversos
Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 03 Oct 2016
Actualizado el 03 Oct 2016
La hipertensión luego de una cirugía del corazón se relaciona con una mayor mortalidad, duración prolongada de la estancia y una mayor incidencia de disfunción renal, de acuerdo con un estudio reciente.
Unos investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad Charité (Charité, Berlín, Alemania), de The Medicines Company (Parsippany, Nueva Jersey, EUA) y de otras instituciones, realizaron un análisis retrospectivo de las respuestas de 5.225 pacientes a quienes se les realizó una cirugía del corazón y que fueron tratados en el Hospital Universitario de Giessen y Marburgo (UKGM; Alemania) durante un período de 7 años, con el fin de evaluar las consecuencias de la elevación de la presión arterial (BP), luego de una cirugía, sobre los resultados médicos y la utilización de recursos.
Los resultados mostraron que los pacientes que presentaron hipertensión luego de la cirugía, experimentaron una mayor tasa de mortalidad intrahospitalaria (4,97 %) en comparación con los casos de los pacientes similares con tensión normal (1,32 %), así como una estancia hospitalaria más prolongada. Además, se aumentaron los niveles de creatinina sérica de los pacientes hipertensos (25,3 %) y la disfunción renal postquirúrgica fue significativamente más frecuente (19,7 %) que en los pacientes con tensión normal. El estudio fue publicado el 9 de septiembre de 2016, en la revista Journal of Cardiothoracic and Vascular Anestesia.
“Los resultados de este estudio, que muestran una relación de la BP alta luego de una cirugía con una lesión renal aguda y la mortalidad, fueron restringidos a los pacientes de alto riesgo a quienes se les realizó cirugía del corazón”, concluyeron el autor principal, Prosser Michael Sander, MD, del UKGM y sus colegas. “En qué medida, si es del caso, se pueden aplicar estos resultados a otros pacientes con características demográficas similares a quienes se les realizó otro tipo de cirugía que no fuera del corazón o incluso a diferentes cohortes de pacientes, sigue siendo tan solo una especulación”.
La insuficiencia renal aguda (IRA) después de una cirugía del corazón tiene una tasa de incidencia entre el 2 y el 8 % y le confiere a esta una morbilidad significativa, un aumento de la utilización de recursos y una mayor mortalidad tanto a corto como a largo plazo. Los factores de riesgo conocidos de que se presente una IRA después de una cirugía del corazón son muy diversos, e incluyen deficiencias en el manejo de la BP tanto antes de la cirugía como durante la misma. Se sabe menos acerca del aporte específico del manejo de la BP y de los valores de la BP post quirúrgicos, para el desarrollo y la progresión de una lesión renal aguda y sobre la respuesta del paciente.