Diafragma de silicona ofrece anticoncepción sin hormonas

Un diafragma ofrece un método de barrera mejorado para el control de la natalidad, ampliando las opciones para las mujeres que no quieren tratamientos hormonales.

El diafragma contorneado Caya está hecho de silicona, así que es más durable que los diafragmas hechos de látex y proporciona una vida útil de cinco años y una vida uso de hasta dos años. Las características de su diseño centrado en la usuaria, incluyen un borde que contiene un resorte de nylon patentado que se comprime durante la inserción y la remoción; unos hoyuelos para el agarre, colocados en el borde del dispositivo, forman un taco dónde apretar para la inserción y una cúpula para retirarlo. Dado que una sola talla sirve para la mayoría de las mujeres, no hay necesidad de hacer un examen para determinar el tamaño correcto del diafragma.


El diafragma Caya se inserta en la vagina como un tampón justo antes de las relaciones sexuales. Cubre completamente el orificio cervical y se coloca entre la bóveda vaginal posterior y el espacio detrás del hueso púbico. Durante y después de la relación sexual, el Caya impide que los espermatozoides entren en el útero, pero debe permanecer en la vagina durante al menos seis horas. El diafragma Caya es producido por Kessel MEDintim (Mörfelden-Walldorf, Alemania) y ha sido aprobado por la Dirección de Alimentos y Medicamentos de EUA (FDA).

“Al hablar durante los últimos meses con los proveedores de planificación familiar sobre este diafragma de tamaño único, 'les brillaban' los ojos cuando escuchaban que está llegando al mercado un nuevo diafragma y que no se requiere ningún examen para su ajuste”, dijo Bob Patane, fundador de HPSRx (Salem, VA, EUA), la comercializadora designada para vender el Caya en los EUA “La reducción de las barreras a nivel del proveedor podría ayudar a traer este nuevo método a toda una nueva generación de mujeres que no han sabido que los diafragmas aún son una opción”.

El diafragma Caya fue diseñado a través de un trabajo conjunto entre PATH (Seattle, WA, EUA), una organización de salud mundial sin fines de lucro; CONRAD (Norfolk, VA, EUA), una organización para el desarrollo de productos de salud reproductiva operado por la Facultad de Medicina de Virginia Oriental (Norfolk, VA, EUA) y la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, Washington DC, EUA). Durante el desarrollo y los estudios clínicos del producto, se le llamaba diafragma SILCS.

“Los estudios clínicos confirman que el diseño y el tamaño único sirven para la mayoría de las mujeres que podrían usar un diafragma tradicional. En el estudio de la efectividad anticonceptiva, recientemente publicado, el 76 % de las mujeres pudo insertar y colocar correctamente el diafragma simplemente siguiendo las instrucciones”, dijo Gustavo Doncel, MD, PhD, director científico y ejecutivo de CONRAD. “Con entrenamiento, el 94 % de las mujeres pudo insertar, colocar y retirar correctamente el diafragma. Esto debería hacer más fácil que se llegue a adquirir y utilizar sistemáticamente”.

“Este método anticonceptivo de barrera, no hormonal y dependiente de la mujer tiene un gran potencial para mejorar las opciones de salud reproductiva de las mujeres, pues aborda varias de las razones por las cuales hay insatisfacción con los anticonceptivos”, dijo Judy Manning, líder del equipo de investigación y desarrollo de anticonceptivos de la USAID. “Este dispositivo puede cumplir con otra función necesaria, al servir como un método para administrar geles que ayudan a proteger contra el VIH y otras infecciones de transmisión sexual. Podría ser nuestro primer producto para prevención, realmente con usos diversos”.

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United States Agency for International Development (USAID)