Algoritmo de reloj inteligente detecta paro cardíaco
Actualizado el 06 Mar 2025
El paro cardíaco extrahospitalario es una emergencia crítica que exige un reconocimiento y una respuesta inmediatos; en casos de paro cardíaco repentino e involuntario, las posibilidades de supervivencia son extremadamente bajas. Uno de los indicadores clave del paro cardíaco es la pérdida repentina del pulso. El uso de biosensores automatizados para detectar paros cardíacos no presenciados y solicitar asistencia médica podría mejorar significativamente las tasas de supervivencia, dado el papel crucial del tiempo en los desenlaces. Sin embargo, para que estos sistemas sean efectivos, es fundamental minimizar la carga de falsos positivos en los servicios de emergencia.
Los investigadores han desarrollado un sistema de inteligencia artificial (IA) para un reloj inteligente que puede detectar signos de paro cardíaco y alertar automáticamente a los servicios de emergencia. Este algoritmo de aprendizaje automático, parcialmente entrenado con datos de pacientes cuyos corazones fueron detenidos intencionalmente durante procedimientos médicos, es capaz de reconocer los principales indicadores del paro cardíaco. Si bien los investigadores creen que este sistema podría salvar vidas, es necesario realizar más pruebas para confirmar su eficacia.

El algoritmo del reloj inteligente, que aprovecha el aprendizaje automático, fue desarrollado por Google Research (Mountain View, CA, EUA) y está diseñado para cumplir con los estándares de rendimiento adecuados para su uso a gran escala. Los investigadores utilizaron primero la fotopletismografía (PPG) para demostrar que las mediciones PPG de la ausencia de pulso periférico (inducida por un modelo de oclusión arterial) reflejan el patrón de señal de la ausencia de pulso observado en la fibrilación ventricular (FV), una arritmia común asociada con el paro cardíaco. Al analizar la similitud entre las señales PPG de la FV y las del modelo de oclusión, desarrollaron y validaron un algoritmo de detección de pérdida de pulso utilizando datos recopilados tanto del modelo simulado como de las condiciones del mundo real.
Una vez desarrollado el algoritmo, los investigadores lo probaron en situaciones del mundo real. Los resultados, publicados en la revista Nature mostraron que el sistema generó una llamada de emergencia no intencional por cada 21,67 años-usuario en dos estudios prospectivos. La sensibilidad del algoritmo fue del 67,23 % (con un intervalo de confianza del 95 % del 64,32 % al 70,05 %) cuando se probó en un modelo simulado de oclusión arterial de paro cardíaco. Estos hallazgos indican que esta nueva tecnología ofrece una solución prometedora para la detección portátil de pérdida repentina de pulso, al tiempo que minimiza el impacto social de las falsas alarmas.