Nuevos materiales inteligentes para tecnología portátil podrían mejorar dispositivos de monitoreo de salud

Los dispositivos portátiles, como los monitores de actividad física y los relojes inteligentes, se han convertido en herramientas populares para controlar la salud de una persona. Ahora, los investigadores están tratando de avanzar en esta tecnología mediante el desarrollo de componentes electrónicos flexibles y suaves que no sólo puedan ofrecer más comodidad sino también proporcionar lecturas más precisas y una mayor duración de la batería.

Los dispositivos portátiles suelen utilizar diodos emisores de luz (LED) para iluminar el tejido humano y un fotodiodo para capturar la luz que regresa. Los patrones e intensidades de esta luz pueden informarnos sobre cambios en la salud cardiovascular. La mayoría de los dispositivos existentes tienen LED rígidos y fotodiodos montados en un material duro como la correa de un reloj. Investigadores de la Universidad Estatal de Florida (Tallahassee, FL, EUA) han creado una alternativa más suave y flexible. Han desarrollado un fotodiodo que es estirable y está colocado en una matriz de polímero elástica. Este diseño permite que el fotodiodo se ajuste cómodamente a la piel sin presión alguna, ofreciendo mediciones más confiables de las métricas cardiovasculares durante más tiempo.

El trabajo ha demostrado mediciones de alta fidelidad y monitoreo a largo plazo de la variabilidad de la tasa de calor y la saturación de oxígeno, lo que potencialmente permitirá dispositivos de fotopletismografía portátiles de próxima generación para el diagnóstico de enfermedades cardiovasculares en el punto de atención de una manera más accesible y asequible. El dispositivo podría mejorar el diagnóstico de enfermedades cardiovasculares y hacer que la atención médica sea más accesible al proporcionar pruebas caseras precisas. Los sistemas de atención médica en todo el mundo están bajo presión y las pruebas caseras precisas darán como resultado que haya más recursos disponibles para atender a la población que envejece.

"La mayoría de los dispositivos de control de la salud son rígidos, pero el tejido humano es blando", dijo el coautor del estudio Zhibin Yu, profesor asociado de la Facultad de Ingeniería de FAMU-FSU. "Nuestro sistema de monitoreo de la salud puede adherirse cómodamente al cuerpo humano y monitorear con precisión las variables cardiovasculares mejor que lo que existe actualmente en el mercado".

"El nuevo fotodiodo se ajusta de forma segura a la piel porque es suave y flexible como nuestro cuerpo", añadió Pengsu Mao, autor principal del estudio. "Le brinda al usuario una lectura cardiovascular más precisa a lo largo del tiempo".

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Universidad Estatal de Florida