Microbioma de pacientes en UCI se transforma a días de la admisión
Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 29 Sep 2016
Un nuevo estudio muestra que los pacientes en la unidad de cuidados intensivos (UCI) han agotado las poblaciones de microbios, promotores de la salud y tienen un recuento mayor de las cepas patógenas.Actualizado el 29 Sep 2016
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado (Aurora, EUA), recogieron muestras orales, de heces y de piel de 115 pacientes mixtos de la UCI provenientes de cuatro centros en los Estados Unidos y Canadá para caracterizar el microbioma de los pacientes. Las muestras fueron recolectadas en dos momentos: al cabo de 48 horas después del ingreso a la UCI, y al alta o en el día 10 en la UCI. Los investigadores evaluaron la composición de origen de las muestras de pacientes de la UCI y los compararon con los del Proyecto del Intestino Americano (AGP), las muestras de cadáveres de mamífero en descomposición y las superficies de las casas.
Los investigadores encontraron que entre los puntos de tiempo y dentro de un paciente, la composición de origen cambió drásticamente, creando una disbiosis (desequilibrio bacteriano) que empeoró durante la estancia del paciente en el hospital. Las muestras de los pacientes de la UCI mostraron niveles más bajos de las bacterias Firmicutes y Bacteroidetes, dos de los mayores grupos de microbios en el intestino, y mayores abundancias de Proteobacterias, que incluyen muchos patógenos. El estudio fue publicado en la edición de agosto de 2016, de la revista mSphere.
“Vimos el rápido crecimiento de organismos claramente asociados con la enfermedad. En algunos casos, esos organismos se convirtieron en el 95% de toda la flora intestinal, todas componían un taxón patógeno, en cuestión de días después del ingreso en la UCI. Eso fue realmente sorprendente”, dijo el autor principal, el anestesiólogo, Paul Wischmeyer, MD. “Algunos de los microbiomas de los pacientes, incluso en el momento de la admisión, se parecían a los microbiomas de los cadáveres; Eso ocurrió en más personas de las que nos gustaría haber visto”.
El cuerpo humano promedio tiene alrededor de 100 millones de millones de microorganismos en el intestino, formando una relación mutualista, simbiótica con el cuerpo; 99% de las bacterias provienen de alrededor de 30 o 40 especies. La actividad metabólica realizada por estas bacterias es igual a la de un órgano virtual, e incluye la fermentación de sustratos de energía no utilizada, el entrenamiento del sistema inmune, la prevención del crecimiento de especies nocivas, la regulación del desarrollo del intestino, produciendo vitaminas para el anfitrión (por ejemplo, biotina y vitamina K) y produciendo hormonas para decirle al huésped que debe almacenar grasas.