Utilizamos cookies para comprender de qué manera utiliza nuestro sitio y para mejorar su experiencia. Esto incluye personalizar el contenido y la publicidad. Para más información, Haga clic. Si continua usando nuestro sitio, consideraremos que acepta que utilicemos cookies. Política de cookies.

HospiMedica

Deascargar La Aplicación Móvil
Noticias Recientes COVID-19 Cuidados Criticos Téc. Quirúrgica Cuidados de Pacientes TI Pruebas POC Negocios Focus

Poca ingesta de sal aumenta riesgos cardiovasculares

Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 24 Sep 2014
Dos nuevos estudios sugieren que mientras que los niveles elevados de sodio son peligrosos, comer demasiado poco también es perjudicial.

Investigadores de la Universidad de McMaster (Hamilton, ON, Canadá), la Academia China de Ciencias Médicas (Beijing) y otros institutos que participan en la investigación de Epidemiología Rural Urbana Prospectiva (PURE) obtuvieron muestras de orina matutinas, en ayunas, de 101 945 personas en 17 países, calculando la excreción de sodio y la excreción de potasio durante 24 horas (utilizado este valor como sustituto de la ingesta). Luego, los investigadores examinaron la asociación entre la excreción calculada de sodio y potasio urinarios y el resultado compuesto de muerte y eventos cardiovasculares mayores (CV), tales como ataque al corazón o un derrame cerebral.

Los resultados mostraron que los que consumieron menos de 3.000 mg de sodio al día tenían un 27% más de riesgo de muerte o de un accidente cardiovascular grave, que aquellos cuya ingesta se calculó en 3.000-6.000 mg. El riesgo de muerte o de otros grandes eventos aumentó con el consumo por encima de 6000 mg. La asociación entre una excreción calculada de sodio alta y el resultado compuesto fue más fuerte entre las personas con hipertensión. Los investigadores concluyeron que la ingesta de sodio de 6.3 gramos por día se asoció con un menor riesgo de muerte y de eventos cardiovasculares. Los estudios fueron publicados en el 14 de agosto 2014, de la revista New England Journal of Medicine (NEJM).

“Sólo una de cada 20 personas en el mundo actualmente comen lo que se recomienda. Esto indica que estamos haciendo recomendaciones que la mayoría de la gente no puede satisfacer; no es una recomendación práctica”, dijo el coautor del estudio, Andrew Mente, PhD, profesor asistente de epidemiología clínica y bioestadística en la Universidad de McMaster. “Esto sugiere que en lugar de concentrarnos en el sodio, debemos dedicarnos a comer una dieta saludable y seguir los cambios de estilo de vida saludables”.

“Si las personas no tienen hipertensión no son obesas, y son más jóvenes, realmente no deberían preocuparse demasiado acerca de la sal”, comentó Suzanne Oparil MD, directora del programa de biología vascular y de hipertensión en la Universidad de Alabama (Birmingham, EUA), en un editorial acompañante. “Deberían hacer otras cosas buenas, como tener niveles altos de actividad física y una dieta saludable. No existe ningún beneficio demostrable de la reducción extrema del sodio, y no debemos concentrarnos tanto en este aspecto”.

Los resultados van en contra de las actuales directrices de la Asociación Americana de Cardiología (Dallas, TX, EUA) y otros grupos para la prevención de enfermedades del corazón, que estableció objetivos diarios de sodio en la dieta entre 1.500 y 2.300 miligramos o más bajo, muy por debajo del el consumo diario promedio en los Estados Unidos de alrededor de 3.400 mg. La cantidad recomendada de sodio es igual a 7.5-15 gramos de sal de mesa.

Enlaces relacionados:
McMaster University
Chinese Academy of Medical Sciences
American Heart Association




New
Miembro Oro
X-Ray QA Meter
T3 AD Pro
Miembro Oro
STI Test
Vivalytic Sexually Transmitted Infection (STI) Array
New
Ultrasonic Cleaner
Cole-Parmer Ultrasonic Cleaner with Digital Timer
New
Electric Cast Saw
CC4 System

Últimas Cuidados Criticos noticias

Tratamiento de ablación podría ser mejor que los medicamentos para supervivientes de infarto

Auriculares de vanguardia permiten detección prehospitalaria precisa de ictus por oclusión de grandes vasos

Nueva herramienta mejora la detección del cáncer de hígado