Células T gamma-delta pueden promover la cicatrización de heridas
Por el equipo editorial de Hospimedica en Español
Actualizado el 13 May 2002
Los investigadores han identificado una función de reparación de heridas para las células T gamma-delta, el componente principal de células T de la piel, pulmones e intestino. Los hallazgos publicados en la edición de Abril 26, 2002 de "Science” pueden ser pertinentes para los tratamientos de enfermedades producidas por enfermedades de las células epiteliales, como el asma, la psoriasis, los cánceres y la enfermedad intestinal inflamatoria.Actualizado el 13 May 2002
"Hasta el momento se ha sabido muy poco de la función de estas células”, explicó la Dra. Wendy Havran, cabeza del grupo investigador del Instituto de Investigación Scripps (La Jolla CA, EUA).
Los científicos saben que las células T gamma-delta se originan temprano en el desarrollo fetal en el timo. De allí, migran a los tejidos epiteliales que conforman las capas más externas de la piel y tapizan los órganos como los intestinos y los pulmones. La mayoría de las células T gamma-delta no circulan en la sangre. Aunque las células T gamma-delta son las primeras células T producidas por el timo, su producción termina en una etapa posterior del desarrollo. La población de células T gamma-delta se mantiene entonces dentro de los tejidos epiteliales. A diferencia de otras células T, que muestran muchos tipos diferentes de receptores que reconocen una gran diversidad de antígenos, las células T gamma-delta de la piel parecen tener poca, si acaso alguna, diversidad y muestran un receptor uniforme y reconocen solamente un antígeno único.
El nuevo estudio mostró que cuando la piel se corta o daña, unas células epiteliales llamadas queratinocitos, comunes en la epidermis, liberan el antígeno reconocido por las células gamma-delta. Esto las activa y se concentran en producir factores de crecimiento que se unen a los queratinocitos y otras células epiteliales, contribuyendo a su proliferación y llevando al cierre de la herida. Las células T gamma-delta también proliferan, multiplicándose para aumentar la respuesta a la herida.
"Cuando faltan las células T gamma-delta, se ve una demora en la cicatrización de las heridas”, dijo la Dra. Havran, añadiendo que el cuerpo tiene otros mecanismos para facilitar la cicatrización de las heridas que eventualmente llevan a su curación.
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Scripps Research Institute