Tratan cánceres con mutación KRAS atacando genes secundarios

Por el equipo editorial de HospiMedica en español
Actualizado el 21 Dec 2009
Para resolver la resistencia a las drogas en los más de 30% de cánceres asociados con las mutaciones en el gen KRAS, los investigadores del cáncer han desarrollado un método para ubicar genes secundarios que son necesarios para la supervivencia de la célula cancerosa.

KRAS (V-Ki-ras2; homólogo del oncogén viral Kirsten del sarcoma de rata) es la proteína codificada por el gen KRAS. Como otros miembros de la familia Ras, la proteína KRAS es una GTPasa y un actor importante en muchas vías de transducción de señales. Normalmente, KRAS está anclado en las membranas celulares a través de un grupo isoprenil en su extremo C-terminal. Mientras que KRAS realiza una función esencial en la señalización del tejido normal, los genes KRAS mutados son oncogenes potentes que participan en muchos tipos de cáncer.

Investigadores de la Escuela Médica de Harvard (Cambridge, MA, EUA) usaron técnicas avanzadas de interferencia de ARN para diferenciar entre los genes activos en los cánceres causados por las mutaciones KRAS y aquellos activos en cánceres con genes KRAS normales. Los resultados publicados en dos artículos en la edición de 29 de mayo de 2009 de la revista Cell señalaban dos blancos potenciales para las drogas.

Un gen blanco potencial es PLK-1 (quinasa-1 tipo polo), la cual es un miembro de la familia de las serina/treonina proteínas quinasas, subfamilia cdc5/polo. Muy homóloga a la quinasa tipo polo (Drosophila), PLK-1 contiene dos dominios de caja polo con un peso molecular predicho de 68kDa. Esta proteína nuclear está muy expresada en la placenta y el colon y ha mostrado que regula la cdc2/ciclina B a través de fosforilación y activación de la fosfatasa cdc25c. PLK-1 también puede ser necesaria para la división celular, mientras que la falta de PLK-1 produce apoptosis.

El segundo blanco es la serina/treonina quinasa STK33. Los investigadores encontraron que las células que dependían de KRAS mutado mostraban una sensibilidad a la supresión de STK33 independientemente del origen del tejido, mientras que las células independientes de KRAS no requerían STK33. STK33 promovía la viabilidad de la célula cancerosa de una manera dependiente de la actividad de la quinasa, regulando la supresión de la apoptosis mitocondrial.

"Las células cancerosas no son súper células” dijo el autor principal, Dr. Stephen J. Elledge, profesor de genética en la Escuela Médica de Harvard. Son células muy enfermas que son necesarias para hacer muchos compromisos. El modus operandi es encontrar el gen involucrado y usarlo para tratar y ‘curar el cáncer' de alguna forma. Esto no siempre ha funcionado porque estas mutaciones no son necesariamente los mejores blancos. Esta estrategia nos permite preguntarnos cuales son los mejores blancos, sin nociones preconcebidas”.

Enlace relacionado:
Harvard Medical School



Últimas Bio Investigación noticias