Compuesto herbal tradicional mata células de cáncer pancreático

Por el equipo editorial de Hospimedica en Español
Actualizado el 17 Jul 2008
Una hierba usada en la medicina tradicional por muchos países del Medio Oriente puede ayudar a combatir el cáncer de páncreas, uno de los cánceres más difíciles de tratar. Los investigadores han encontrado que la timoquinona, un extracto del aceite de la semilla de Nigella sativa, bloquea el crecimiento de las células pancreáticas y destruyó las células promoviendo el proceso de muerte celular programada.

Aunque los estudios están en sus etapas iniciales, los hallazgos sugieren que la timoquinona podría eventualmente tener algún uso como estrategia preventiva en pacientes que han sido operados y han recibido quimioterapia, o en individuos con un riesgo alto de desarrollar cáncer.

Según Hwyda Arafat, M.D., Ph.D., profesora asociada de cirugía en el Colegio Médico Jefferson de la Universidad Thomas Jefferson (Filadelfia, PA, EUA), la N. sativa ayuda a tratar varias enfermedades, incluyendo algunas enfermedades inmunes e inflamatorias. Los estudios anteriores también han demostrado actividad anticáncer en cánceres de próstata y colon, además de efectos antioxidantes y antiinflamatorios.

Mediante el uso de una línea de células de cáncer pancreático humanas, la Dra. Arafat y su equipo demostraron que la timoquinona mató aproximadamente el 80% de las células del cáncer. Encontraron que la timoquinona disparaba la apoptosis, y que afectaba a varios genes importantes, incluyendo p53, Bax, bcl-2, y p21. Los investigadores descubrieron que la expresión de p53 un gen supresor de tumores, y Bax, un gen que promueve la muerte celular programada, se aumentaba, mientras que bcl-2, que bloquea este tipo de muerte celular se disminuía. El gen p21, el cual está involucrado en la regulación de diferentes fases del ciclo celular, estaba muy aumentado. La investigadora presentó sus hallazgos en Mayo 2008, durante la Semana de la Enfermedad Digestiva, en San Diego, CA, EUA.

La Dra. Arafat y sus colaboradores también encontraron que la timoquinona causaba cambios epigenéticos en las células de cáncer pancreático, modificando el ADN de las células, Reportó que estos cambios implican la adición de grupos acetilo a la estructura del ADN, específicamente a bloques de proteínas llamadas histonas. Este proceso de acetilación puede ser importante para que los genes sean leídos y convertidos en proteínas. En este caso, implica los genes que son claves para iniciar la muerte celular programada. "Observamos el estado de las histonas y encontramos sorprendentemente que la timoquinona aumentaba el proceso de acetilación”, dijo la Dra. Arafat. "Nunca anticipamos eso”.

Al mismo tiempo, la adición de timoquinona a las células de cáncer pancreático reducía la producción y actividad de enzimas llamadas histona deacetilasas (HDACs), las cuales eliminan los grupos acetilo de las histonas, deteniendo el proceso de transcripción genética. La Dra. Arafat observó que los inhibidores de HDAC son una clase de drogas que interfieren con la función de las histonas deacetilasas, y se están estudiando como tratamiento para el cáncer y las enfermedades neurodegenerativas. "Encontrar que la timoquinona funciona como un inhibidor HDAC, fue algo muy sobresaliente y realmente emocionante”, agregó.

El cáncer pancreático, la cuarta causa principal de muerte por cáncer en los Estados Unidos, mata aproximadamente a 34.000 personas al año. La enfermedad es detectada frecuentemente después de que ha hecho metástasis, y solamente el 4% de los individuos con cáncer pancreático viven cinco años después del diagnóstico.




Enlaces relationados:
Thomas Jefferson University

Últimas Bio Investigación noticias