Cepa mutante de tuberculosis causa mayor mortalidad
Por el equipo editorial de Hospimedica en Español
Actualizado el 04 Feb 2004
Investigadores de enfermedades infecciosas han encontrado que una cepa de la bacteria de tuberculosis que habían modificado removiendo un gen de virulencia, era realmente más patógena que la cepa original silvestre.Actualizado el 04 Feb 2004
La tuberculosis es causada por M. tuberculosis, la cual infecta un tercio de la población mundial y mata a dos millones de personas al año. Para entender mejor los factores de virulencia que determinan como la bacteria infecta las células huésped, los investigadores de la Universidad de California (Berkeley, USA) diseñaron genéticamente una cepa de M. tuberculosis sin el operón mce1. Los organismos de la cepa mutante y de la cepa original silvestre fueron inyectados en ratones.
Los investigadores reportaron en la edición en línea de la revista "Proceedings of the [U.S.] National Academy of Sciences”, que la cepa de M. tuberculosis sin el operón mce1 no podían causar un estado persistente de infección en los pulmones de los ratones. Por el contrario, el mutante continuó replicándose y mató a los ratones de manera más rápida que la cepa silvestre. A las 27 semanas, los ratones infectados con los mutantes empezaron a morir, mientras que sus contrapartes infectadas con la cepa silvestre sobrevivieron hasta el final del experimento a las 41 semanas.
Los macrófagos de ratón que crecían en cultivo de tejidos fueron infectados con la cepa mutante. Las bacterias mostraron una habilidad reducida para inducir la producción de factor de necrosis tumoral alfa, IL-6, proteína 1 quimioatrayente de los monocitos y óxido nítrico (NO), pero no la IL-4. Cuando los genes faltantes fueron colocados nuevamente, la cepa mutante estimuló el factor de necrosis tumoral alfa y la producción de NO por los macrófagos de ratón a casi los mismos niveles que la cepa silvestre. Estos resultados sugieren que el operón mce1 puede estar involucrado en la modulación de la respuesta inflamatoria del huésped de tal manera que la bacteria puede entrar a un estado persistente sin ser eliminada, o causar enfermedad en el huésped.
"La marca de la bacteria de TBC es su capacidad de permanecer dormida en el cuerpo de una persona por años, convirtiéndola en una de las bacterias más exitosas que existen”, explicó el autor principal, el Dr. Lee Riley, profesor de epidemiología y enfermedades infecciosas en la Universidad de California. "Inclusive si pudiésemos tratar a todas las personas que actualmente tienen infección activa, nunca podríamos erradicar completamente la TBC, porque el 60% de las personas expuestas a la TBC desarrollan infecciones latentes. La TBC es muy difícil de tratar, no porque mate a las personas rápidamente sino porque permanece dormida. Si entendemos el mecanismo responsable de la latencia, también podremos desarrollar pruebas diagnósticas nuevas que predecirán quien desarrollará la enfermedad activa”.
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University of California, Berkeley